En el departamento del Meta, las inundaciones provocadas por las torrenciales lluvias y por los desbordamientos de los ríos Ariari, Duda, Guaviare y Guayabero, han dejado 1.600 damnificados, 5.000 hectáreas de cultivos afectadas y miles de millones de pesos en pérdidas, lo que originó que en 20 de los 29 municipios se decretara la calamidad pública para facilitar la destinación de recursos e impulsar la ayuda.

 

A pesar que el gobierno departamental declaró la calamidad pública por la ola invernal, ni sus recursos ni los de los municipios, son suficientes, por lo que hago un especial y urgente llamado al gobierno nacional, para que a través de todas sus agencias cuyo objeto se encamina a atender calamidades, se ponga en marcha de manera inmediata en coordinación con los entes territoriales y locales, planes de recuperación, construcción y reconstrucción de las zonas afectadas, y la atención pronta y eficaz a las víctimas.

 

Así mismo, atender con prioridad las zonas cuya infraestructura vial resultaron gravemente afectadas con pérdida de la transitabilidad con la presente ola invernal tales como: 

 

- Puentes sobre los ríos Yucao y Manacacías del municipio de Puerto   Gaitán.

- Puente caños negros en el municipio de Guamal

- Vía, Pipiral-Villavicencio.

- Vía, Calvario-San Juanito.

- Vía, Puerto Lleras-Puerto Santander (municipio Fuente de Oro).

-Vía, San Juan de Arama-Granada, afectación a estructuras de puentes.                                                                                                        

- Vía municipio la Uribe-Mesetas.

- Vía Puerto López-Puerto Gaitán-Puente Arimena-Porvenir.

La situación se agrava aún más ante la falta de recursos, los cuales no han sido girados para la vigencia 2016 para atender las emergencias.