La senadora Gilma Jiménez pide que se investiguen las denuncias que desde mayo presentó la madre de los niñ@s en Bogotá.
Según denunció la senadora Gilma Jiménez (Partido Verde), son recurrentes y continuas las denuncias de niñ@s que estando protegidos por el ICBF en el programa de hogares sustitutos, terminan violentados o muertos, en un programa que el Estado mantiene y en el que no solo no los protegen a todos, sino que por el contrario en muchos casos siguen siendo víctimas de vulneración de sus derechos o terminan muertos en extrañas circunstancias.
En los más de 5.000 hogares sustitutos que funcionan en el país, en los que se atienden en promedio 12 mil niñ@s, es decir 2 niñ@s por hogar, se invierten más de $95.000 millones al año, las madres sustitutas reciben más de $400.000 mensuales, además de una reciente bonificación aprobada en el Congreso. Ellas hacen parte de familias que a cambio de dinero reciben niñ@s para cuidar, a los cuales el ICBF les ha dictado medida de protección, porque en sus familias les vulneraron sus derechos.
No obstante que por ley son medidas transitorias que no pueden superar seis meses, en algunos casos los niñ@s duran años en esos hogares, a veces se generan lazos de afecto entre los miembros de los hogares sustitutos y los niñ@s, y por diferentes razones el ICBF luego se los quita. En otros casos como el denunciado recientemente en Bogotá, los niñ@s sufren en esos hogares maltratos y abusos, éste último en el que presuntamente 3 niñ@s fueron objeto de violencia estando al cuidado de un hogar sustituto. En cualquiera de los casos, a los niñ@s se les está haciendo daño, señaló la senadora.
La Senadora manifestó: "Con los niñ@s a los cuales sus familias les han vulnerado sus derechos ya sea porque los abandonan o los agreden, el margen de error debe ser menos cero y deben ser debidamente protegidos. El Estado debe garantizar por lo menos su adecuado cuidado y eso no sucede siempre. No son casos aislados, es una preocupante constante, por eso ese programa debe desaparecer y deben ser replanteados de fondo los programas de protección del ICBF, tal vez la labor más importante de esa institución".
En diciembre de 2010 en Bogotá Juan Pablo Gutiérrez de 5 meses fue puesto en protección junto a su hermano gemelo en un Hogar Sustituto; ocho días después murió en extrañas circunstancias. Ese hogar lo manejaba una enfermera y tenía a su cuidado 4 niños, más sus 2 hijos. Los padres del niño denunciaron que el cadáver del niño no se lo querían entregar a ellos, sino al ICBF y con el apoyo de un abogado finalmente les fue entregado en medicina legal, fue entregado sin los ojos del menor.
Wilson de 7 años fue puesto en protección en junio de 2006 en un Hogar Sustituto en Paz de Ariporo, 4 años después en el 2010 él niño se desapareció y apareció su cadáver en estado de descomposición días después. La causa de la muerte según medicina legal es indeterminada. El ICBF informó que el niño llevaba 15 días perdido, pero medicina legal señaló que llevaba entre 15 días y un mes muerto cuando fue encontrado. En Casanare existen delicadas denuncias por manejos irregulares con los recursos de los Hogares Sustitutos.
Estos dos casos indican la tragedia que han tenido que sufrir decenas de niñ@s a los cuales no solo les vulneraron sus derechos en sus hogares, sino que por la irresponsabilidad de las instituciones, terminan muertos por desidia o descuido, o son asesinados, en programas que financia el mismo Gobierno.
Finalmente la Senadora manifestó: "Un país en el que los niñ@s son violentados de forma tan severa y recurrente, no puede mantener una entidad que en teoría existe para protegerlos y restablecerles sus derechos, pero que no solo no cumple a cabalidad sus funciones, sino que por malas decisiones pone en riesgo la vida misma de los niñ@s que debe proteger, eso repito, es inmoral e inhumano. Se lo he expresado al Director del ICBF y al mismo Presidente de la República en múltiples oportunidades".