Las organizaciones de mujeres piden que se ponga en la agenda pública el tema de la mujer en el conflicto armado del Llano.
Por iniciativa de la Comisión legal para la Equidad de la Mujer y de ONU Mujeres, en la ciudad de Villavicencio se llevó a acabo el foro sobre “Violencia contra las mujeres en el campo y en la ciudad”, con el fin de determinar los mecanismos para acabar con la violencia contra las mujeres del departamento del Meta. Con la participacion de mujeres electas y organizaciones de mujeres.
En la instalación la senadora Nohora Tovar, del Centro Democrático, resaltó el apoyo que siempre ha ofrecido el organismo internacional ONU Mujeres, en la defensa de los derechos de las mujeres, “debemos valorar estos aportes, unirnos y articular esfuerzos para visibilizar todos los temas de mujeres, para hablar el mismo idioma y así contrarrestar esas alarmantes cifras de violencia en el departamento.
La congresista también hizo alusión sobre lo difícil que es para la mujer incursionar en el mundo de la política. Señaló las diferentes formas de maltrato que sufren las aspirantes, “en medio de todo eso, tenemos que hacernos respetar y sacar adelante todo el potencial que tenemos”.
Dijo que se debe optimizar los recursos destinados para la protección de los derechos de las mujeres del departamento; asi mismo habló de la importancia de articular todos los esfuerzos de las instituciones para acabar con la agresión a la mujer. Aseguró que no se están respetando los derechos de las mujeres del llano ni se está aplicando la ley que las protege.
Informó que el 80% de todos los delitos contra las mujeres están quedando impune. Señaló la importancia de hacer las campañas de prevención en los planteles educativos, en los barrios, el hogar, para fomentar el respeto a las mujeres, “esa es la vía para acabar con tanto atropello contra el género, la tarea debe ser diaria, no sólo el 25 de noviembre”.
También habló de la necesidad de crear un hogar de paso para atender a las mujeres del departamento cuando son agredidas. Invitó para que todas denuncien, para evitar que las cifras sigan en aumento.
Por su parte, Soraya Hoyos de ONU Mujeres dijo que es preciso fortalecer el diálogo entre la Asamblea departamental y la Bancada de mujeres del Congreso. Anotó que las responsabilidades institucionales que indica la ley 1257, no se está cumpliendo, porque no existen las capacidades en el territorio, por parte de los funcionarios. El organismo internacional manifiesta que la alta prevalencia de la violencia contra las mujeres, es uno de los principales obstàculos que enfrentan las mujeres del meta. Segùn el Instituto Nacional de Medicina legal, durante el periodo 2009-2014 reportò 379 muertes violentas, en mujeres del departamento, correspondientes a 331 homicidios y 48 suicidios y se registraron 21.396 sobre violencia interpersonal, familiar y violencia sexual.
“Esto nos obliga a dar una mirada para suplir estas necesidades, las entidades públicas deben asumir su responsabilidad, como el acompañamiento que deben hacer a las Comisarias de familias que atienden en primera instancia a las mujeres víctimas de violencia, aquí de debe poner todos los esfuerzos en estos cuellos de botellas”, afirmó Soraya.
Entre tanto, Nancy Gómez Ramos, integrante de la “Asociación del Meta con Mirada de Mujer”, manifiesta ser víctima de violencia sexual. Ella hace parte de la mesa de seguimiento a la ley 1719. Dijo que es vergonzoso que el departamento superé la tasa nacional ocupando el quinto lugar y el cuarto en violencia sexual.
“Necesitamos que se hagan efectivas las denuncias, que se sancionen a los agresores", afirmó la congresista.
Indicó que están haciendo un diagnostico sobre la violencia de las diferentes situaciones que padecen las mujeres en el departamento, para mostrarle a las autoridades la realidad que viven las llaneras, para que actúen rápidamente y se mitigue estos hechos. Asegura que solo le dan muchas actividades pedagógicas y publicidad, pero, que no se ejerce la justicia de manera efectiva.
De la misma manera lo hizo Sheila Sanín, representante del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, quien consideró que estos espacios fortalecen a las organizaciones, por el trabajo conjunto que vienen realizando. “Esto genera un cambio y una política para acabar con tanta violencia, donde ellas aprenden más sobre sus derechos, en las capacitaciones se crean incidencias en los territorios. Son buenos pasos, para tener unas mujeres rurales empoderadas, que las lleven a superar las barreras del machismo, para que se les reconozcan sus derechos”.