El senador del Centro Democrático, Iván Duque, presentó “Un ajuste con serios desajustes”, un documento de análisis de la actualidad y los desafíos que le esperan al país en materia macroeconómica, teniendo en cuenta que este no será un año alentador para la economía colombiana ya que el panorama internacional es cada vez más volátil y que las acciones de política económica internas que se han tomado no logran concretar resultados efectivos.
Aspectos como crecimiento económico, inflación, tasas de interés, entre otros fueron tenidos en cuenta a la hora de la elaboración del documento que dejó conclusiones como las siguientes:
· Crecimiento económico. Para el cierre de este año se espera un crecimiento cercano al 2,5%, el cual se explica por el débil desempeño sectorial y las fragilidades en la actividad económica de los socios comerciales del país, lo que afecta la demanda externa de nuestros productos. El 2016 será un año complicado para las locomotoras económicas.
· Inflación. Es quizás el impuesto más alto para los hogares de menores ingresos, pues erosiona su capacidad de compra en detrimento de su calidad de vida.
En principio, el aumento del nivel de precios estuvo explicado por los efectos de la devaluación y un choque de oferta transitorio, producto del fenómeno del Niño, que ahora es un problema estructural de demanda.
· Confianza del consumidor. El Índice de Confianza del consumidor ha permanecido durante un semestre con balance negativo, durante este período alcanzó mínimos históricos (no registrados desde 2002), especialmente en enero cuando el balance llegó a niveles de -21,3.
La menor confianza se relaciona con un mayor debilitamiento del consumo de los hogares en lo que queda del año, con particular atención al consumo de bienes durables.
· Inversión Extranjera. La Inversión Extranjera Directa se redujo en 31% durante los primeros 6 meses de 2016, resultado que obedece a la caída en la inversión foránea dirigida al sector minero – energético la cual cayó 52% en el mismo período (hace un año esta caída fue del 23%).
Los resultados de un menor flujo de capitales se traducen en mayor depreciación, menores reservas internacionales y mayor deuda en moneda extranjera. Todo esto erosiona aún más la confianza económica.
· Política Fiscal. El Marco Fiscal de Mediano Plazo 2016 muestra un aumento de 43% en el déficit del Sector Público No Financiero, esto equivale a más de 8 billones de pesos respecto al déficit inicialmente proyectado en el Marco Fiscal de Mediano Plazo 2015.
El aumento en más del 37% del déficit para Gobierno Nacional Central (GNC) hizo que este ya no fuese equivalente al 3.0% del PIB, como inicialmente se pronosticó en 2015, sino a que posiblemente represente un 3,9% del PIB en 2016.
En cuanto a los ingresos tributarios la situación no es del todo clara, ya que aunque se logre cumplir con la meta de recaudo para este año para poder financiar el nivel de inversión y lograr la disminución del déficit fiscal del GNC, serán necesarios ingresos adicionales a partir de 2018.
Algunas de las conclusiones del reporte macro de este año, realizado por el senador Iván Duque son:
· El ajuste real que necesita la economía se maquilló detrás de falsas proyecciones que ocultaron la realidad que se está afrontando actualmente, la cual fue advertida con anterioridad. Fuera de ello, el problema va mucho más allá, pues sin lugar a dudas el mayor ajuste se tendrá que asumir no ahora sino a partir de 2018.
· De las 5 locomotoras originales del gobierno (vivienda, infraestructura, minería, agricultura e innovación), 4 fueron descartadas para movilizar a ‘La Nueva Economía’. Es sorprendente que se haya dejado por fuera dos locomotoras que, hasta hace poco, sacarían adelante la economía del país como son infraestructura y vivienda.
· Algunas de las características de ‘La Nueva Economía’: tiene ajustes fiscales que solo resisten en el papel. Tiene motorcitos y no locomotoras. Tiene una política de austeridad mal focalizada. Aumento desbordante de la deuda pública. Informalidad laboral y desempleo juvenil al alza.