ORDENAMIENTO TERRITORIAL Y DESCENTRALIZACIÓN EN COLOMBIA
El debate sobre el proceso de municipalización ocupa un lugar importante en el actual pensamiento político sobre el desarrollo social y la democracia. Aspectos tales como la relación entre modernización institucional del Estado y la distribución espacial del poder en el sistema político; la capacidad ciudadana de autogobierno en espacios políticos menores; la participación social y el desarrollo de las libertades individuales, son todas cuestiones actualmente vinculadas a lo municipal.
Un análisis de este tipo sólo puede realizarse bajo la consideración de que la descentralización es un acto continuo de voluntad política que consiste en la transferencia de responsabilidades técnicas y políticas al municipio; además, este proceso se constituye al interior de un proyecto nacional y no a su margen; y que la fuerza y rapidez con que se materialice expresa la visión o idea de país predominante en cada sistema político nacional. A su vez, la descentralización es un componente esencial de la ineludible tarea de democratizar el Estado.
COMPETITIVIDAD REGIONAL
El desempeño empresarial depende de la competitividad de sus regiones y por extensión de la del país. La dimensión regional de la competitividad es esencial en nuestro país, debido a su extensión y gran diversidad geográfica.
En la conformación de las regiones existe influencia de la geografía física, la geografía humana y las ciencias ambientales en la configuración del territorio espacialmente, acorde con los objetivos de desarrollo económico, social, cultural y la política ambiental.
El desarrollo regional busca como objetivos la productividad y competitividad económica, la integración socio-cultural y la representación y gestión políticas.
Del análisis de estos conceptos se concluye que es en el nivel regional en donde el territorio es interface entre lo nacional y lo local, integrada alrededor de hechos articuladores. Metodológicamente, se debe realizar el ejercicio a nivel intra-regional e inter-regional, asumiendo desde la región la construcción de nación.
¿Colombia hacia un modelo de descentralización?
Comencemos por remitirnos al artículo primero de la Constitución “Colombia es un Estado Social de Derecho, organizado en forma de República unitaria, descentralizada con autonomía de sus entidades territoriales, democrática,...”. ¿Implica esta autonomía el cambio de un modelo centralista a uno regional? Definitivamente no, en nuestro caso no es vista la región como una opción política, implicaría entre otras cosas sustraerle funciones legislativas al Congreso para entregárselas a las regiones, en ningún momento puede por lo tanto la configuración regional afectar el modelo de estado, se clasifica como descentralización administrativa.
El artículo 286 de la Carta Fundamental define como entidades territoriales los Departamentos, los Municipios, los territorios indígenas y los Distritos, a su vez que abre la posibilidad para la creación de las Regiones y las Provincias.
En este sentido el Proyecto de Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial - LOOT- que hace su trámite en el Congreso desarrolla basada en el artículo 307, la Región Administrativa y de Planificación -RAP- y un Fondo de Desarrollo Regional como instrumento de financiación y no crea las condiciones para la conversión de la Región como Entidad Territorial.
Me asalta una inquietud, a mi juicio fundamental en la regionalización del país. ¿Es el Departamento la base fundamental para la conformación de región? Así lo vio la Constitución del 91 (artículo 306), pero considero no está actualmente acorde con los objetivos de desarrollo económico, social, cultural y de política ambiental anteriormente expuestos. La práctica en países como España e Italia y experiencias colombianas, nos indican lo contrario.
¿Ha existido voluntad política en nuestro país para impulsar el proceso de descentralización? Basta con remitirnos a los ya 20 años de trámites de la LOOT o a la expedición de los recientes decretos con ocasión del la Emergencia Económica, Social y Ecológica, léase por ejemplo la conformación de los llamados Fondos de Calamidad y de Adaptación, y nos daremos cuenta que tal vez debamos esperar otros 20 años, para que se constituyan verdaderas regiones en Colombia que faciliten el Desarrollo Económico y la generación de Equidad Social en el país.